2 de mayo de 2024. Primer día entero en Zagreb. Hoy ha sido un día bastante completo con la visita al museo técnico Nikola Tesla, una visita guiada a pie por la ciudad de dos horas y media y un recorrido histórico —también a pie— sobre las guerras del siglo XX que casi ha durado tres horas.
Pero primero lo primero. El alojamiento no tiene servicio de desayuno y en la habitación tampoco hay hervidor de agua o cafetera para poder preparar un café y desayunar. Como ayer vimos que había muchas panaderías con muy buena pinta, hemos ido a desayunar a una de ellas.
Desayuno y primera visita del día
Hemos ido a desayunar a una panadería que vimos ayer por la tarde —estaba cerrada por ser festivo— que, además de panadería, también era cafetería. Un acierto.
Los precios en Zagreb, habiendo estado de momento poco más de 24 horas, son ligeramente más bajos que en España, pero tampoco se podría decir que es un país barato; también es cierto que en España se han ido de pinza tanto los precios en hostelería y hotelería que han hecho baratos al resto del mundo. Dos piezas de bollería, dos panecillos y dos cafés han costado algo más de 7 euros. No está mal, pero tampoco es que sea regalado. Es cierto que todo estaba muy bueno y en pleno centro de la ciudad.
Estábamos en la plaza principal —plaza Ban Jelačić— y justo teníamos allí mismo la parada del tranvía que nos ha llevado a la primera visita del día: el museo técnico Nikola Tesla. En menos de 10 minutos hemos llegado a la puerta del museo. Como no hemos tenido que esperar al tranvía —justo ha llegado cuando hemos llegado a la parada—, y nos ha dejado en la puerta del museo, hemos llegado 20 minutos antes de la apertura.
Museo técnico Nikola Tesla
Resulta que el museo técnico Nikola Tesla tiene una parte de libre acceso con varios objetos curiosos con su cartel informativo. Gracias a esto, la espera hasta la apertura se ha pasado volando.
Hemos tenido la suerte de ser los primeros en entrar al museo y, gracias a ello, hemos podido hacer fotografías sin gente poniéndose en el medio. Conforme ha ido pasando el tiempo ha ido llegando más y más gente, y ya era imposible hacer fotos sin «espontáneos» en medio.
Tras casi hora y media recorriendo el museo —no había tiempo para más, teníamos la visita guiada a 11:00—, nos ha parecido espectacular. El museo cuenta con una vasta e interesante colección que abarca distintas temáticas: transporte —bicicletas, motos, tranvías, coches, aviones, etc.—, industria petrolífera, medicina, espacio exterior, bomberos, etc. Un largo etcétera. Sin lugar a dudas es un museo para pasar la mañana entera.
Recorrido a pie por Zagreb
Nada más salir del museo hemos vuelto a coger un tranvía para regresar a la plaza Ban Jelačić. Allí empezaba nuestro recorrido a pie por la ciudad. Bueno, en realidad hemos dejado pasar dos o tres tranvías porque queríamos viajar en uno de los antiguos, pero al final no ha habido forma, todos eran nuevos.
El recorrido a pie ha tenido una duración de dos horas y media. En él hemos visitado prácticamente los mismos puntos que vimos ayer por la tarde, pero con una guía local —hablaba español casi perfecto— que nos ha ido proporcionando información muy útil —aunque he podido comprobar que mi base de conocimiento sobre Zagreb y Croacia no era mala—.
Hora de comer
El recorrido a pie ha terminado donde ha empezado, es decir, a escasos cinco minutos andando del alojamiento. La guía nos ha comentado que por la tarde, a las 16:30, ella misma hacía otro recorrido sobre las guerras del siglo XX. Ya teníamos pesado hacer uno el sábado que viene, pero nos ha gustado tanto esta guía que nos hemos apuntado.
Como por la tarde íbamos a tener otra vez casi tres horas de andada, hemos comprado algo de comer en la panadería que hay en frente del alojamiento y hemos comido en la habitación. Después, por supuesto, hemos echado una buena siesta.
Recorrido sobre las guerras del siglo XX
Desde que empecé a documentarme sobre Zagreb y Croacia, no pude evitar leer sobre la antigua Yugoslavia y sus terribles guerras a lo largo del siglo XX. Mi conocimiento sobre esas guerras era casi nulo y ya vi que este viaje sería una buena ocasión para conocer su historia in situ.
El recorrido ha empezado en el mismo lugar que el de esta mañana. Los que habíamos estado por la mañana teníamos un generoso descuento de 10 euros, por lo que me ha sorprendido que de todos los que estábamos esta mañana —tranquilamente éramos 30 personas— solo estábamos una pareja más y nosotros.
A lo largo del recorrido hemos ido visitando distintos puntos de la ciudad, aunque lo realmente importante era la narración de la guía. Fascinante. Ha logrado tratar un tema tan complejo con la mayor objetividad posible. Ha sido especialmente emocionante aprender historia de alguien local, que la ha vivido. De hecho, el padre de la guía fue soldado voluntario en los años 90 y su tío… ¡director de la policía secreta de la dictadura de Tito! Eso sí, solo lo supieron cuando hace pocos años Alemania lo reclamó como responsable de alguna muerte en Alemania; actualmente está huido de la justicia.
No solo se ha hablado de las guerras, sino también de las sucesivas dictaduras que hubo. Al llegar a la de Tito, lamentablemente no hemos podido dejar de encontrar similitudes con la dictadura de Franco. Al terminar el recorrido hemos estado hablando un largo rato con la guía para comentarle esto. Sorprendentemente, era buena conocedora de nuestra historia —más que la mayoría de los españoles—, aunque se ha sorprendido cuando le hemos contado el ascenso fascista que estamos sufriendo en España. Al despedirnos nos ha deseado suerte; esperemos que no la necesitemos.
Cena típica por recomendación
La guía de los dos recorridos de hoy nos ha recomendado un sitio para comer o cenar uno de los platos más típicos de Croacia: Štrukli, una especie de lasaña solo de queso —nunca con carne—. De hecho, parece ser que es tan típico que lo llaman «comida de abuela». Delicioso.
Hemos dado buena cuenta del Štrukli y entre que llovía y que ya el cansancio apretaba, nos hemos ido al alojamiento a descansar y a dormir que mañana tenemos día de excursión.