Hace unos días asistí a un congreso en Nueva York, en Estados Unidos. Solo puede hacer turismo dos días de los cuatro que estuve allí, uno antes del congreso y y otro despúes. Así pues, tuve que ver Nueva York en dos días.
Día 1
Aunque había llegado de madrugada no quería perder el tiempo por lo que, después de dormir algo más de cuatro horas, me puse en pie sobre las 6:30 (o, como dirían allí, las 6:30 am).
El hotel lo tenía en el Midtown Manhattan así que cogí un metro para bajar al Lower Manhattan. Me encanta andar pero había más de una hora hasta mi destino y no podía invertir tanto tiempo.
La primera parada de mi visita fue en el Staten Island Ferry. La idea era coger el ferry gratuito hacia Staten Island ya que pasa muy cerca de la Estatua de la libertad y, además, te muestra una de las vistas más típicas del Lower Manhattan. Así lo hice.
Los ferries hacia Staten Island salen cada 20-30 minutos dependiendo del momento del día. El trayecto de ida y vuelta es de apenas una hora y tienes la oportunidad de ver la estatua dos veces. Recuerda ponerte en el lado derecho cuando salgas de Manhattan y en el izquierdo al volver.
Una vez de nuevo en Manhattan, empecé mi camino hacia el norte subiendo por Broadway. La siguente parada fue la Trinity Church para despúes continuar hasta la famosa Wall Street.
En Wall Street encontramos dos de los de edificios más importantes de Nueva York: el Federal Hall – icónico edificio donde George Washington fue investido primer presidente de los EE.UU. en 1789 – y el edificio de la Bolsa de Nueva York.
Volviendo a Broadway, y desviándome a la derecha, llegé al 9/11 Memorial, el monumento en recuerdo de los ataques sufridos por la ciudad el 11 de septiembre de 2001. Justo al lado de este memorial se encuentra el nuevo icono de la ciudad, el One World Trade Center.
Al lado del One World Trade Center se encuentra el centro comercial Westfield World Trade Center y, junto a éste, había unos cuantos food trucks así que comí allí.
Justo al lado del Westfield se encuentra la Saint Paul’s Churchyard, la única capilla que se conserva de antes de la guerra de independencia y que data de 1766.
Volviendo a Broadway, y a escasos cinco minutos andando, llegué hasta el ayuntamiento de Nueva York desde donde parte el famoso puente de Brooklyn.
El puente de Brooklyn une los distritos de Manhattan y Brooklyn. Fue el primer puente que se construyó entre ambos distritos – entre 1870 y 1883 – y, en su momento, el puente colgante más grande del mundo (1825 metros).
Al llegar a Brooklyn giré a la izquierda para llegar al barrio de Dumbo. Allí encontramos dos imágenes típicas de la ciudad:
- Plymouth Street con el puente de Brooklyn al fondo.
- Vista de Manhattan desde Main Street Park.
Me quedé en Dumbo a cenar y a esparar el anochecer para ver Manhattan iluminada.
Día 2
Ya en mi último día en la ciudad, decidí vistar un de los parques más emblemáticos de la ciudad: Central Park.
Para llegar a Central Park cogí el metro ya que iba a empezar mi camino en la parte norte por lo que me encontraba a más de hora y media andando.
Central Park no solo es el parque más famoso de Nueva York si no que además es el más grande – según Wikipedia es casi dos veces Mónaco y casi ocho El Vaticano – con unos 3,4 km² de superficie.
Dentro del parque hay una carretera por donde van las bicicletas. Éstas tienen prohibido circular por cualquier otra parte por lo que no vas a darte ningún susto con algún ciclista loco. Existe la posibilidad de alquilar una o, si lo prefieres, de que te lleven en un carro tirado por caballos. Bajo mi punto de vista la mejor manera de conocer el parque es andando.
Después de una buena caminata por el parque y de haber visto varios de sus principales atractivos del parque (Jacqueline Kennedy Onassis reservoir, the great lawn o el castillo Belvedere) me dirigí al metro para hacer mi última parada antes de irme: la biblioteca pública de Nueva York.
La biblioteca pública de Nueva York se encuentra en Bryant Park, en pleno corazón de Manhattan. Se trata de una de las bibliotecas más importantes del mundo y el edificio que la alberga es impresionante.
El acceso a la biblioteca es libre y puedes recorrer prácticamente todas sus salas (aunque algunas están reservadas solo para personal investigador).
Además de los dos días dedicados íntegramente al turismo, pude aprovechar las idas y venidas al centro de congresos para ver otros puntos de interés:
- Times Square
- Catedral de Nueva York
- Rockefeller Center
- Grand Central
- Edificio Empire State
- Edificio Chrysler
- Sede de las Naciones Unidas