Situadas en la frontera entre los departamentos de Altos Pirineos (región de Occitania) y Pirineos Atlánticos (región de Nueva Aquitania), las grutas de Bétharram son las más grandes de Francia y las segundas de Europa.
Aunque todo el conjunto recibe el nombre de Bétharram, en realidad hay dos grutas: la de Bétharram (gruta superior) y la de Mélat (gruta inferior).
Las grutas fueron descubiertas en 1819 por un grognard (soldado napoleónico). En 1888, varios miembros del Club Alpin de Pau, comenzaron con las grandes exploraciones de las grutas. No fue hasta 1903 cuando, gracias al encomiable trabajo del artista Léon Ross — quien llevó a cabo el acondicionamiento y la electrificación de las grutas —, las grutas se abrieron al público.
Actualmente se pueden visitar todos los días de la semana. La entrada general cuesta 16,50 € (julio de 2023) y la de niños 11,50 € (julio de 2023). Puedes consultar todas las tarifas en su página web.
Visita a las grutas de Bétharram
La visita a las grutas empieza en el aparcamiento. Allí mismo hay una pequeña caseta donde hay que esperar a un autobús que te lleva al comienzo de la visita. Este autobús es gratuito y hace un pequeño recorrido de apenas 2 km.
Al bajar del autobús entras directamente en el edificio de la taquilla donde hay que adquirir la entrada. Justo al lado de la taquilla está la entrada para el comienzo de la visita. Ahí mismo, si no entiendes el francés, te ofrecerán una audioguía en 10 idiomas (entre ellos el español). Esta audioguía es muy útil ya que es automática y, cuando el guía empieza con la explicación en francés, tú escuchas la explicación a tiempo real en tu idioma. Esta audioguía no tiene coste adicional.
Gruta superior
La visita a las grutas de Bétharram comienza en la gruta superior. Hay que tener en cuenta que en el interior de las grutas hay una temperatura constante de 14 grados, tanto en verano como en invierno. En esta primera parte, el guía explica el origen de la cueva y su historia desde que fue descubierta.
Pasear por el interior de esta gruta es simplemente impresionante. Es increíble la cantidad de estalactitas y estalagmitas que hay. Hay varias formaciones que tienen cierta apariencia a formas reconocibles (en ocasiones, en mi opinión, algo cuestionables), siendo la más famosa el elefante.
En el techo de esta gruta se puede apreciar prefectamente el antiguo transcurso del rio por el interior de la cueva. Ahora el rio transcurre por la gruta inferior.
Todo el recorrido, como en el resto de la visita, se realiza sobre una plataforma de pavimento perfectamente nivelado por lo que no hay ningún riesgo de tropiezos inoportunos.
Gruta inferior
A través de una escalera de más de 300 escalones descendemos a la gruta inferior. Aquí la temperatura baja dos grados hasta situarse en 12 grados.
Esta gruta es muy distinta a la anterior. Si bien la gruta superior destaca por su riqueza en formaciones de origen cálcico, la inferior destaca por albergar el actual cauce del río y por las formas que éste ha ido esculpiendo en las paredes.
El recorrido por esta gruta transcurre por estrechos pasillos que apenas permiten ir a dos personas en paralelo (no es nada agobiante gracias a sus altos techos). Conforme se va bajando, se comienza a escuchar el transcurrir del agua hasta que, finalmente, se llega al río.
Es en este punto donde se encuentra una de las partes más famosas de la visita: el pequeño viaje en barco. En realidad el barco va sobre una especie de railes subterráneos pero no deja de ser una experiencia curiosa. Como curiosidad, comentar que poco antes de llegar a este punto habremos pasado del departamento de Pirineos Atlánticos al departamento de Altos Pirineos.
Después de bajar del barco toca subir los únicos escalones de toda la visita, poco más de 60. Se sigue avanzando por la gruta hasta llegar al segundo punto más famoso de la visita: el tren. Nos montamos en un pequeño tren eléctrico para recorrer los últimos 600 m de la gruta y salir al exterior.
Cuando se baja del tren, se entra en un espectacular edificio que actualmente tiene las funciones de tienda de recuerdos y cafetería.
Fotografías de las grutas de Bétharram
Bonito lugar 🙂