En la localidad austriaca de Obertauern encontramos una de las mejores estaciones de esquí alpino —también dispone de circuito de esquí de fondo— del país. Al menos en mi opinión, claro. Buenas instalaciones, gran dominio esquiable y buena calidad de nieve son tres de las claves de esta estación.
La estación se encuentra directamente en el pueblo. Allí mismo puedes encontrar: taquillas para comprar el forfait —59,00 € los adultos en la temporada 2023/2024—, tiendas para alquilar material deportivo, gran variedad de hoteles y restaurantes, varios aparcamientos, etc.
Todos los años procuro ir a esta estación de esquí que me cautivó desde la primera vez que fui ya hace unos años. No sabría decir qué es exactamente lo que más me atrae, aunque me imagino que no es solo una cosa en particular, sino varias en su conjunto.
Las pistas en Obertauern
El nivel y la calidad de las pistas en Obertauern es simplemente espectacular. Eso sí, no es una estación especialmente recomendable para personas que se estén iniciando en el esquí alpino —no hay ninguna pista verde de iniciación—, ya que, prácticamente todas las pistas son, en distinta medida, bastante exigentes.
El dominio esquiable llega a los 100 km y se divide en 61 km de pistas azules, 35 km de pistas rojas y 4 km de pistas negras. Dicho esto, que no te engañe la clasificación que hacen de las pistas: muchas azules en muchos lugares serían rojas y muchas rojas serían negras.
En general, las pistas son muy anchas y, aunque haya bastante afluencia de gente, siempre tienes una trazada limpia para bajar cómodamente. La calidad de la nieve, sobre todo en plena temporada, suele ser muy buena —por supuesto depende de las zonas, no es lo mismo el valle a 1738 m de altitud, que arriba del Gamsleiten a 2357 m de altitud— y en abundancia —tener varios metros de espesor es habitual—.
Pequeños detalles que marcan la diferencia
Como casi siempre sucede cuando llegas por primera vez a una estación de esquí alpino, al llegar a Obertauern te preguntas: ¿por dónde empiezo? En este caso la solución es sencilla: puedes seguir uno de los dos recorridos Tauernrude que te proponen.
Los Tauernrude son dos recorridos —rojo y verde— perfectamente marcados en el plano de pistas. Estos recorridos te llevarán a recorrer toda la estación alrededor del pueblo sin repetir pista y que, probablemente, te lleve toda la jornada completar.
Por otra parte, en un intento de amenizar la visita y animar a seguir esquiando, cada vez que utilizas un telesilla vas sumando puntos. Al final de la jornada puedes ir a la página web de la estación y consultar —con el número de forfait— todos los usos que has hecho.
Casetas en Obertauern
Otra de las cosas que más me gusta de la estación es, sin duda, la calidad de las casetas de restauración. Las hay en varios puntos y se encuentran directamente en las pistas —algo totalmente habitual en las pistas de Austria—, es decir, tú vas esquiando y, cuando quieres, te metes a una sin tener que abandonar tu recorrido.
Son especialmente acogedoras y ofrecen una amplia selección de comidas y bebidas —frías y calientes—. Puedes hacer una parada a media mañana para tomar, por ejemplo, un café, un refresco y un strudel, pero también para comer más en serio con varios platos típicos de la zona.
Los precios, aunque probablemente algo más caros que en otras partes, no son especialmente muy altos —respecto a Austria, claro—: strudel de manzana, skiwasser —refresco típico de las pistas— y capuchino te puede salir por unos 15 €. Curiosamente, los precios de los platos más «fuertes» tienen un precio parecido e incluso se pueden percibir como más baratos.
A lo largo de los años, uno va teniendo sus sitios favoritos y hay dos casetas en especial a las que suelo ir siempre en mis visitas a Obertauern. La primera (Dikt’n Alm) es bastante grande y cerca de los hoteles —hoteles dentro de la estación— y de un par de telesillas, y la segunda (Achenrain Hütte) algo más pequeña pero en medio del descenso de una pista. Ambas son, como no podía ser de otra manera, de madera y de estilo alpino.